Conociendo a… Adhara Rodríguez Redondo, del Club de Ajedrez Ébano Barrio Nuevo

Conociendo a… Adhara Rodríguez Redondo, del Club de Ajedrez Ébano Barrio Nuevo

jueves 21 de noviembre de 2024
Volver Conociendo a… Adhara Rodríguez Redondo, del Club de Ajedrez Ébano Barrio Nuevo

Adhara Rodríguez Redondo (San Cristóbal de La Laguna, 25/04/2004) se interesó por el Ajedrez desde muy pequeña, a los cinco años, gracias a que su madre inscribió tanto a ella como a su hermano en clases de ajedrez. Con apenas 20 años, esta talentosa jugadora del Club Ajedrez Ébano Barrio Nuevo acumula un impresionante palmarés que la coloca entre las mejores de su generación. Entre sus logros más destacados figuran el título de Subcampeona del Mundo sub16 en Ajedrez Rápido, Campeona de España sub16, Campeona de España por Parejas Mixtas, Campeona de España sub2300 y Campeona de Tenerife Femenina y Absoluto, siendo la primera mujer en conseguir esta última distinción. Adhara, la actual y cinco veces campeona de Canarias Femenina, combina talento, dedicación y una gran estrategia que la posicionan como una referente en el tablero.

 

¿A qué edad empezaste a jugar al ajedrez?

Empecé a jugar a los cinco años. Mi madre apuntó a mi hermano mayor a un club de ajedrez (Fundación CajaCanarias) porque cada vez que intentaba jugar con él en casa le tiraba todas las piezas y no le dejaba. Sin embargo, como siempre quería seguir a mi hermano a todas partes, quise apuntarme con él a esas clases de ajedrez y así empezó mi aventura con esta disciplina.

¿Cómo fueron tus primeros pasos en este mundo?

Me encantó desde el primer momento. Al poco tiempo de empezar a aprender, arranqué a competir en campeonatos insulares y regionales, y obtuve grandes resultados. De hecho, comencé a ir a clases con el Gran Maestro José Luis Fernández y competí a nivel nacional. Recuerdo con mucha ilusión ir casi todas las tardes al club y jugar torneos todos los fines de semana con mi madre y mi hermano. Creo que, sin duda, poder compartir estos momentos sobre el tablero con mi familia en mis inicios ha hecho que ame tanto este deporte.

¿Cuántas horas dedicas al entrenamiento?

Actualmente compagino el ajedrez con mis estudios universitarios de Doble Grado en Criminología y Seguridad, así que el tiempo es un poco limitado. Por norma general, entreno una media de 5 horas diarias con mi amiga y maestra Rebeca Jiménez, con la que ahora vivo. La verdad es que tengo que agradecerle por facilitarme los entrenamientos y motivarme a mantener la rutina. Es un pilar fundamental. También he empezado a impartir clases en la Tecnificación Canaria, por lo que al preparar estas clases también aprendo mucho y practico. En lo personal, diría que estoy en una de las mejores épocas deportivas de mi vida, con los objetivos más claros que nunca.

¿Cómo te preparas para una partida importante? ¿Tienes alguna rutina o método específico?

Todavía, aún llevando 15 años compitiendo, me sigue costando afrontar esas últimas partidas que definen los campeonatos importantes. Intento tomármelas con mucha tranquilidad, haciendo ejercicios de concentración y siguiendo los consejos de mi psicólogo deportivo, pero nunca es fácil. La competición es muy dura en el ajedrez. Puedes llevar un torneo increíble y que un pequeño fallo en la última ronda te cueste el torneo entero. Lo que mejor me funciona es preparar un poco la partida, revisar cómo juega mi rival y después desconectar. Siempre llevo mi altavoz a los torneos y escucho música antes de las partidas para concentrarme, luego me siento frente al tablero y a disfrutar.

¿Cuál consideras que ha sido, por el momento, tu mayor logro deportivo?

El que más me ha hecho ilusión fue mi primer Campeonato de España sub-16 en 2020. Llevaba mucho tiempo esperando ese momento. Había conseguido bastantes podios, pero el primer puesto se me resistía demasiado. Ese año hice un muy buen torneo e incluso llegué a luchar por el podio absoluto cuando en la ronda 5 gané en la primera mesa contra un jugador más fuerte que yo. Mi juego fue bastante constante en todo el campeonato y conseguí proclamarme campeona. Además, recuerdo que ese año iba bastante desmotivada. Fue el año del Covid-19 y habíamos estado confinados en casa, así que llevaba tiempo sin jugar y entrenar. Sin embargo, además de mi entrenador José Luis, mi madre volvió a acompañarme a un torneo tras unos años sin poder hacerlo. Eso me dio las fuerzas necesarias, ya que sabía que probablemente sería el último Campeonato de España al que me vendría a ver porque ya se estaba haciendo mayor y no teníamos tantos recursos. Por lo tanto, la motivación en ese campeonato fue extra al saber que, si ganaba, lo iba a poder compartir en persona con ella.

¿Cuál ha sido tu partida o torneo más difícil? ¿Qué aprendiste de esa experiencia?

Mi partida más difícil fue contra el Gran Maestro brasileño Alexandr Fier. Era el rival más duro al que me habías enfrentado hasta el momento. Jugaba de blancas y conseguí una posición buenísima. Tras cuatro horas jugando, llegué a un final con muchas opciones de ganar, pero con poco tiempo en el reloj. Fier me ofreció las tablas y las rechacé sin dudar, pero los nervios cada vez eran mayores. Al par de jugadas terminé perdiendo la ventaja y después de un grave error perdí la partida. Fue muy doloroso, pero a la vez muy gratificante. Había rechazado el empate a un jugador increíble porque sabía que continuar la partida me daría un nuevo aprendizaje. Años atrás había tenido situaciones parecidas y había aceptado las tablas, incluso ante rivales menos imponentes que el brasileño. En este caso me sentí mejor rechazándola y perdiendo tras intentarlo.

¿Tienes algún consejo para otras jóvenes que están comenzando a jugar ajedrez?

Mi consejo sería que si les gusta de verdad no lo dejen nunca, que siempre tengan un hilo que les una con este deporte. Que se obsesionen -de una manera sana por supuesto- y que disfruten del proceso. A veces para las chicas es más complicado sentirse cómodas, en el mundo de ajedrez la proporción de mujeres está alrededor del 10%, y encontrar a chicas que hagan lo mismo que tú en la época de la adolescencia es importante. Este deporte te enseña a “luchar” ante tus amigas, que también son tus rivales, y es importante ayudarse entre todas porque los objetivos van mucho más allá de ganar una partida concreta.

¿Qué objetivos te planteas para este final de año? ¿Y de cara al 2025?

Centrándome en los torneos a la vista, me gustaría hacer una buena actuación en el Campeonato de España Absoluto y en el europeo femenino que se jugará en Mónaco. Y si hablamos del próximo año, tengo en mente seguir entrenado y mejorando. Así como, subir mi puntuación ELO, conseguir las normas que me faltan para ser Maestra Internacional y entrar en el Equipo Olímpico Español.

 

 

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